La manzanilla es ampliamente conocida a nivel mundial fundamentalmente por sus posibles usos populares para aliviar malestares digestivos o conciliar el sueño.
Te invitamos a leer nuestro artículo para conocer más sobre esta tradicional planta. Veremos de dónde proviene su nombre, cuál es su origen, cuáles son los usos más frecuentes, cómo debe prepararse para su utilización y qué debemos tener en cuenta antes de comenzar a emplearla.
¿Qué es la manzanilla?
Es una planta herbácea, es decir que se caracteriza por no tener un tallo leñoso, de la familia de las asteráceas, lo que significa que sus flores tienen forma de estrella. En el caso de la manzanilla sus flores son blancas con un centro amarillo y sus hojas son finas y pinnadas.
El nombre manzanilla deriva del latín “chamo milla” y del griego “chamaimelon”, que significan manzana de la tierra, debido a la similitud de su aroma.
Si bien es una planta originaria de Europa y Asía, se ha extendido a América y África, creciendo fundamentalmente en terrenos templados y secos; presentando dos variedades la común: Matricaria Chamomilla y la romana: Chamaemelum nobile.
¿Para qué sirve la manzanilla?
Los usos que se le han dado a la manzanilla realmente son muy amplios abarcando desde medicinales, cosméticos y alimentarios, a continuación, veremos en mayor detalle cada uno de ellos.
Como uso medicinal, por sus propiedades antinflamatorias se emplearía para el tratamiento de afecciones digestivas y de las vías urinarias como por ejemplo indigestión, náuseas, inflamación, gases y cistitis. En tanto por su acción descongestiva, podría emplearse para aliviar los síntomas de resfríos, gripe y tos y finalmente por su acción como relajante suave se emplearía para conciliar y mejoraría la calidad del sueño.
En cosmética, se emplea como materia prima en una amplia variedad de productos debido a sus beneficios para la piel, entre los que se destacan sus propiedades calmantes en pieles sensibles o irritadas y también para disminuir la inflamación de los ojos cansados.
En la industria alimenticia, se emplea como colorante y también cumple un rol clave en el sector apícola ya que la manzanilla es una de las flores que más atraen a las abejas favoreciendo entonces la producción de miel, polen y propóleos.
¿Cuáles son los beneficios de la manzanilla?
Los beneficios de la manzanilla se atribuyen mayoritariamente a sus posibles propiedades medicinales: antiinflamatorias, antiespasmódicas y calmantes continuación, veremos a qué se deben cada uno de ellos y qué usos se le han dado a la planta en función de estos.
¿Cómo actúa en el cuerpo?
La manzanilla posee una gran variedad de compuestos bioactivos, es decir que al ingresar a nuestro organismo pueden provocar un efecto beneficioso para nuestra salud.
En el caso de los flavonoides y terpenos ayudarían a reducir la inflamación del cuerpo, en tanto el azuleno encontrado en sus aceites esenciales tendría efecto calmante al actuar a nivel de los neurotransmisores de nuestro sistema nervioso.
Los compuestos bioactivos con acción antiespasmódicas estimularían la producción de jugos gástricos facilitando la digestión y aliviando los cólicos.
Por otra parte, los compuestos con características antioxidantes, ayudarían a combatir el estrés oxidativo provocado por los radicales libres en nuestras células.
Finalmente, los compuestos con acción antimicrobiana podrían ayudar por ejemplo en el tratamiento de afecciones de la piel como el acné.
Posibles efectos secundarios
La manzanilla se considera una planta segura, siempre y cuando se utilice en las cantidades recomendadas, lo cual veremos en el siguiente bloque.
En caso de presentarse son generalmente poco frecuentes y leves, pudiendo incluir náuseas, mareos y reacciones alérgicas, está ultima sobretodo en personas con antecedentes de alergia a plantas de la misma familia (ambrosía, crisantemos, caléndulas o margaritas). Los síntomas de la alergia suelen comprender irritación en la piel y/o ojos, secreción nasal y estornudos, pero raramente son de gravedad.
Se conoce muy poco sobre su uso durante el embarazo y la lactancia por lo que no puede asegurarse que sea seguro en dichas etapas. Se recomienda siempre la consulta previa al profesional de la salud de confianza.
Si utilizo medicamentos, ¿qué debo tener en cuenta?
Si utilizas medicamentos que previenen la formación de coágulos sanguíneos es decir anticoagulantes deberías tener en cuenta que la manzanilla puede aumentar dicho efecto, por lo que se recomienda consultar con su médico tratante antes de utilizar dicha planta.
Como vimos la manzanilla tendría un efecto sedante, por lo que aumentaría el efecto de medicamentos empleados para dicho fin, así como si consume alcohol.
La manzanilla adicionalmente podría alterar los efectos del tamoxifeno, la terapia de sustitución hormonal y anticonceptivos orales con estrógenos, por lo que también está indicado consultar a su médico.
Es importante destacar que se cuenta con poca información sobre posible interacción con otros medicamentos por lo que igualmente se deberá estar atento a cualquier posible cambio en su salud y consultar a la brevedad en caso de presentarse.
¿Cómo debe prepararse para su uso?
La forma más habitual de utilizar la manzanilla es la preparación de té a partir de sus flores secas o bolsitas de té. Esta infusión puede ingerirse o aplicarse en forma de compresas por ejemplo sobre la piel irritada o para disminuir la inflamación de los ojos.
Te brindaremos una serie de consejos prácticos para que lo realices correctamente y obtengas los mejores resultados:
Ingredientes: 1 o 2 cucharaditas de flores secas de manzanilla o si lo prefieres puedes usar bolsitas de té.
1 taza de agua caliente.
Pasos a seguir:
Hervir el agua: lleva el agua a ebullición.
Añadir las flores: una vez que el agua esté caliente, retirar del fuego y añadir las flores de manzanilla o los sobres.
Infusión: Cubrir la taza y dejar reposar durante 5 a 7 minutos.
Colar: Si usaste las flores sueltas debes colar la infusión y si usaste la bolsa de té debes retirarla.
Recomendaciones de uso:
Momento de tomarla: ½ hora después de las comidas principales para ayudar a la digestión o antes de dormir para relajarte. Es opcional endulzarla y para ello puedes elegir azúcar, miel, edulcorantes o gotas de limón a gusto.
Uso tópico: Se puede aplicar la infusión fría en forma de compresas para calmar irritaciones de la piel o disminuir la inflamación de los ojos.
Conclusión
Recordemos que la manzanilla podría emplearse para aliviar malestares digestivos, molestias respiratorias, ayudarnos a conciliar el sueño, calmar nuestra piel irritada y disminuir la inflamación de nuestros ojos cansados. Siempre con la previa consulta profesional.
Por lo tanto, incorporar el té de manzanilla en nuestra rutina podría ser una forma natural de mejorar nuestro bienestar y obtener beneficios para la salud por la amplia variedad de propiedades que presenta, además de que es muy fácil acceder a ella y prepararla.
Igualmente, tengamos en cuenta que antes de comenzar a emplearla debemos saber si somos alérgicos a alguna planta de su familia, así como saber que medicamentos empleamos, y si tenemos alguna condición médica preexistente. Ante cualquier duda siempre consultar a nuestro médico.
Referencias
www.infobae.com/salud 2024/06/28, beneficios del té de manzanilla para la salud.
https:// the conversation.com/es-la manzanilla una panacea, qué nos dice la ciencia- Publicado 09/04/2024 Roman Studio/Schutterstock.
