¿Qué es el Diente de León?
El Diente de León es una hierba medicinal de la familia de las “malezas”. Independientemente de su vibrante color amarillo y sus grandes beneficios, ésta flor puede pasar desapercibida en jardines o praderas por su abundancia y apariencia común.
Posee grandes propiedades medicinales como su alto poder diurético y depurativo por su alto contenido de agua o la reducción del estreñimiento y crecimiento de la microbiota intestinal.
Además, es antiinflamatorio, antioxidante y una fuente rica en vitaminas A, C, K, complejo B y en minerales como hierro, potasio, calcio y magnesio. También se usa como aditivo en comidas por su sabor algo amargo y dulce en hojas tiernas.
Historia y origen del Diente de León
Se encuentra distribuido por casi todo el mundo, pero es originario de Europa y Asia, aunque algunas fuentes afirman que puede ser nativa de Norteamérica. En los orígenes fue utilizado en la medicina griega para las molestias estomacales y en las civilizaciones árabes del medio oriente los médicos describieron sus múltiples beneficios. Asimismo, en la Edad Media se utilizaba el jugo como remedio para tratar las enfermedades oculares.
¿Cuáles son los beneficios del diente de león?
Sus dos beneficios más significantes son sus efectos en el hígado y en el riñón.
Como fue mencionado anteriormente, al tener un alto contenido de agua el Diente de León estimula la producción de orina y bilis, asimismo depurando el sistema urinario de los desechos remanentes. Tiene una doble acción en el hígado debido a que además de estimular la producción de bilis también facilita la digestión de las grasas ya que realiza un vaciado desde la vesícula biliar hasta el duodeno.
Es rico en antioxidantes como polifenoles, carotenoides y flavonoides lo cual ayuda a la prevención de enfermedades ya que estos nos protegen frente a radicales libres.
Contiene inulina en su raíz, un prebiótico que contribuye al crecimiento de la flora intestinal.
Con respecto a las vitaminas: La vit A y la vit C protegen la piel, esta última con la estimulación de producción de colágeno mientras que la vit K ayuda con la coagulación de la sangre y la fabricación de huesos y tejidos sanos. El complejo B participa en la producción de glóbulos rojos y ayuda en la salud neuronal.
Los minerales presentes en el Diente de León también aportan sus beneficios, como ser: El magnesio en la contracción muscular y la regulación del sistema nervioso. El potasio contribuye en el correcto funcionamiento del riñón, el mantenimiento del ritmo cardíaco y también en la contracción muscular. El calcio en la fortificación de los huesos y dientes y finalmente el hierro contribuye en la formación de la hemoglobina (proteína presente en glóbulos rojos).
¿Cómo prepararlo?
Hay varias maneras de consumirlo, todas sus partes son comestibles, incluida la raíz.
Puede consumirse con el extracto líquido o seco, en tisana o en cápsulas en polvo con una dosis aproximada de 3 a 10 g tres veces al día dependiendo de la parte que se consuma.
Tisana: Con 1-2 cucharadas de una mezcla de hojas y raíz se llevan a ebullición con 150 mL de agua, se deja reposar durante 15 minutos y se edulcora a gusto. Se recomienda una taza de infusión por la mañana y otra por la noche.
Ensaladas: En este caso las hojas pueden agregarse a las ensaladas cuando son tiernas.
Guisos, puré y sopas: Incorporar hojas cuando están maduras a estos acompañamientos.
Como complemento: Se puede agregar a platos o infusiones para aumentar el sabor amargo o el aprovechamiento de sus nutrientes.
Posibles efectos secundarios y precauciones
Es importante saber que a partir de determinada cantidad de consumo de la planta sus beneficios no aumentarán, en cambio, el consumo será contraproducente. Si nos excedemos el cuerpo rechazara el alimento y se pueden producir malestares gástricos.
También es fundamental conocer las precauciones que hay que tener en el consumo:
- Contraindicado en casos de obstrucción de vías biliares, enfermedades renales o cardíacas y trastornos hepáticos.
- Aumenta el efecto de medicamentos diuréticos, anticoagulantes y bloqueantes neuromusculares.
- No consumir en caso de tomar antiácidos.
- En caso de tener enfermedades cutáneas como eccema, la probabilidad de presentar una reacción alérgica es alta.
- Es importante consultar al profesional de salud correspondiente en caso de querer adquirirlo en tu dieta.
Conclusiones
El Diente de León es una planta medicinal muy beneficiosa para nuestra salud debido a su gran variedad de propiedades medicinales que favorecen el funcionamiento del Hígado y Riñón. Es también antioxidante debido a sus componentes y posee un aporte de vitaminas y minerales necesarios para el funcionamiento adecuado de nuestro organismo. Es recomendable su consumo en las cantidades recomendadas y consultar con tu profesional de la salud de confianza frente a cualquier duda.
Referencias